La espera
El encuentro
El amor
La boda
La familia
El abandono
El intento de suicidio
La vejez
La vejez II
El hundimiento
Guardo un bonito recuerdo de este viaje a Amsterdam, fue una Semana Santa del 2005,
cuando el mundo era un poco más analógico.
Fueron tomadas con película y quería que fueran mi primera entrada porque las considero mi primer trabajo
como fotógrafo. Desde entonces sigue siendo una obsesión... Aún recuerdo con nostalgia las noches de
luz roja y sabor a químicos en la garganta.
Dicen que París es la ciudad del amor, pues para una bici esa ciudad debe ser Amsterdam.
Allí las bicicletas, tras años de trato con el hombre, adoptan costumbres humanas y llegan a tener vida propia...
2 comentarios:
Que historia tan bonita,cada vez que la miro me gusta mas,me dan una penaaaa,les coges cariño y su vida se vuelve tan triste ,la abandonan,se intenta suicidar, envejecen,se hunde....despues de enamorarse! Me las llevaria a mi casa para que no sufrieran...jajaja.
Me encanta la historia!!!
Recuerdo la historia con música... pero las fotos tienen tanta fuerza que la música sobraba, ¿verdad? Espero que todo te vaya muy bien, Argider. Tenemos que hacer una quedada de ex-becarios, este año he retomado contacto con la gente :)
Besos,
Cintia
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